miércoles, 24 de junio de 2020

MAREAS POR LA EDUCACIÓN PÚBLICA: PROPUESTA DE ORGANIZACIÓN Y MEDIDAS A ADOPTAR PARA UNA VUELTA A CLASE SEGURA EN EL NUEVO CURSO ESCOLAR 2020-2021

Mi fotoDesde Mareas por la Educación Pública han lanzado una PROPUESTA DE ORGANIZACIÓN Y MEDIDAS A ADOPTAR PARA UNA
VUELTA A CLASE SEGURA EN EL NUEVO CURSO ESCOLAR 2020-2021. Aquí os la dejo:
https://drive.google.com/file/d/1PKCBfmQzUO92k_g1pCL8b-Fxu1FkSCJf/view

"Empresas españolas liderando el futuro"

El presidente de CEOE, Antonio Garamendi, y el de Cepyme, Gerardo Cuerva, en la cumbre empresarial organizada por la patronal. Fuente: Público.
En otras entradas ya hemos hablado del interés (monetarizado) de algunas grandes empresas españolas por "orientar" o "liderar" sectores como la educación o la sanidad (en consonancia con las directivas neoliberales de la Unión Europea en torno a los servicios públicos). Tras la pandemia, la Confederación de Empresarios Españoles ha organizado una "Cumbre empresarial" (15-25 de junio), donde los líderes empresariales han tenido un altavoz mediático sobre sus (ya viejas y conocidas) propuestas neoliberales. Hacen más visible así su poder de presión sobre las decisiones políticas, ya bastante generosas en el "rescate" al tejido empresarial, aunque en "mínimos" (Renta Mínima Vital) con los más desfavorecidos. 
En el diario Público (24/06/2020), Ramón Gorriz y José Babiano escribieron un interesante artículo sobre esta Cumbre y sus propuestas: "Cumbre empresarial o cómo volver a las andadas tras la pandemia".
Distintas asociaciones y movimientos sociales están organizando una plataforma "Contra las desigualdades sociales y ambientales", en la que proponen otra salida a la actual "nueva normalidad".

miércoles, 17 de junio de 2020

Pasos para evitar el colapso ecosocial.

En el interesante artículo de Jorge Riechmann, "La crisis del coronavirus como momento del colapso ecosocial" (Viento Sur, 09/06/2020) se plantean algunos pasos necesarios para un "cambio sistémico" que no nos haga volver hacia atrás tras esta pandemia. Es cuestión de ponerse ya manos a la obra:
· Abandonar el PIB como supuesto indicador de bienestar: desarrollar un sistema de cuentas físicas para complementar los indicadores monetarios de la Contabilidad Nacional.
· Socializar las compañías eléctricas y el sector bancario.
· Reducir por ley el tiempo de trabajo asalariado, para redistribuirlo. Medidas de acompañamiento para redistribuir todos los trabajos (pagos e impagos).
· Reforma fiscal fuertemente progresiva, con impuestos al capital, a la herencia y a las grandes fortunas.
· Jubileo de deudas injustas e impagables (como se ha recordado más de una vez estos últimos años, la acumulación de capital tiene, como su reverso, la creación de deuda sin relación con la realidad biofísica y más allá de la posibilidad de reembolso).
· Ingreso mínimo garantizado y esquemas de trabajo garantizado desde el sector público.
· Desmercantilización de la vivienda.
· Conversión industrial hacia la fabricación de bienes necesarios (hemos visto cómo las plantas automovilísticas se ponían a fabricar respiradores para las Unidades de Cuidados Intensivos; es sin duda un ejemplo inspirador…).
· Reducción drástica de la movilidad motorizada; salida de la soberanía del automóvil privado; urbanismo ecológico.
· Desglobalización ordenada; “constitución de redes de cooperación bio-regional basadas en relaciones sostenibles entre los ámbitos urbanos, rurales y naturales en economías (y sistemas alimentarios) resilientes de proximidad”, por decirlo con Fernando Prats.
· Agroecología, agricultura de proximidad, permacultura.
· Renaturalización de zonas muy extensas en campos y ciudades.
· Alfabetización e ilustración ecológica a escala masiva (también aquí el despliegue informativo y pedagógico sobre el coronavirus nos da la medida de lo que tendría que ser tomarnos de verdad en serio la urgencia ecosocial).